sábado, 16 de enero de 2016

Sin ti.

Y aquí estoy. Una noche más. Sin ti. Sin tus buenas noches. Sin tus besos. Sin el calor de tus abrazos y sin tu aliento erizándome la piel de la nuca. Otra noche más tratando de aferrarme a los recuerdos, esos que me desgarran en lo más profundo de mi alma. Esos que me consumen. Los que no me dejan pensar con claridad. Y otra noche más te pediría que volvieses, que regreses, que no sigas caminando hacia delante sin mí, y suena egoísta, lo sé, pero nunca quise que hicieras tu vida sin mí, no te voy a mentir. Quería abrazarte hasta quedarme dormida todas las noches y verte a mi lado cuando abriera los ojos todas las mañanas. Quería pasar las horas muertas en tu cama sin hacer absolutamente nada. Quería reír por cualquier estupidez que solo nos hace gracia a los dos. Quería llorar porque te tienes que ir o porque me tengo que ir yo. Quería tener tus mensajes de buenos días y tus besos de buenas noches. Quería ver los estrenos en el cine de todas las películas que nos gustan y ponerme nerviosa cuando me quitas el móvil o me tiras palomitas al pelo. Quería que siguiéramos caminando de la mano por la calle durante meses. Quería vivir primaveras, veranos, otoños e inviernos a tu lado. Quería seguir siendo la culpable de esa sonrisita que te salía cuando te miraba a los ojos sin decir absolutamente nada. Quería seguir siendo la que te hiciera perder los nervios. Quería tus besos. Quería tus caricias, tus abrazos. Quería tu risa en medio de una respiración entrecortada. Quería tus manos encajando con las mías. Quería que mi cuerpo se tensara cada vez que me rozaras. Te quería a ti. En todos los aspectos. En todas las estaciones del año. Otra noche más le gritaría tu nombre al cielo y se lo susurraría a mi almohada entre sollozos si supiera que con eso volverías. Otra noche más te diría vuelve, te suplicaría que no me dejaras, y posiblemente volverías, pero no lo haré porque otra noche más yo sigo aquí, dejando que me consuman mis propios pensamientos, que me consumas tú, y disfrutando de ello, porque joder, otra noche más, te quiero. Y ese sentimiento permanecerá noche tras noche de modo que todas sean igual. Otra noche más eres el que tiene la llave de mi corazón. Eres el que lo tiene en sus posesiones. Otra noche más mi corazón o los pedazos que quedan de él te están pidiendo a gritos que vuelvas. Y sin embargo tu no lo haces. Otra noche más sé que no has vuelto. Sé que ya no huele a ti mi camiseta, ni mis sábanas, ni siquiera mi cuarto. Sé que ya nadie le da calor a mis manos, que sabes que siempre estaban frías. Sé que posiblemente nunca volverás, y contigo desaparecerá cualquier atisbo de felicidad. Y créeme me duele más a mí que a ti. Otra noche más aquí me tienes, ahogándome en mi propio vaso de agua mientras escucho a "maldita Nerea" y le pido al destino que vuelva a unirnos algún día. Aunque solo sea para recordar todo aquello que una vez vivimos y que por ti, no pudimos volver a vivir. Aunque sea solo para que me mires y me recuerdes como la historia que pudimos haber sido y que tú te negaste a escribir. Solo para que recuerdes que te he querido y lo sigo haciendo, posiblemente más de lo que nadie podrá amarte jamás. Que te has grabado a fuego en mi piel, en mi cabeza y en mi corazón, y de una forma u otra siempre te querré, aunque ahora deba ser en lo más profundo de mí.